Hepatis B

El virus de la hepatitis B (VHB) se transmite por la exposición a sangre, semen y otros líquidos corporales infecciosos. También puede transmitirse de la madre infectada a la criatura en el momento del parto o de un miembro de la familia infectado a un bebé.
Otra posibilidad es la transmisión mediante transfusiones de sangre y productos sanguíneos contaminados, inyecciones con instrumentos contaminados durante intervenciones médicas y el consumo de drogas inyectables.
El VHB también plantea un riesgo para el personal sanitario cuando este sufre pinchazos accidentales de aguja mientras asiste a personas infectadas por el virus.

Aunque en estos momentos no existe una cura real para la hepatitis B, disponemos de medicamentos como el interferón alfa y el peginterferón, así­ como de diversos fármacos antivirales. Estos medicamentos ralentizan la replicación del virus y, en ocasiones, consiguen su eliminación. Y lo que es más importante, reducen considerablemente el riesgo de las complicaciones que la hepatitis B puede causar, como cirrosis y cáncer de hí­gado.

 

 

Existe una vacuna segura y eficaz

 para prevenir esta infección